Atelier Tanaka Volumen 1 - Prólogo
- yumenosubs39
- 10 ago 2024
- 2 Min. de lectura

Prologo
Un ambiente blanco en donde no hay nada, no había nadie ni nada más que yo y dios frente a mí, no había suelo bajo mis pies, no había cielo sobre mi cabeza, no se veía el horizonte, no había nada adelante, no había nada detras, ¿Si el espacio fuera blanco sería así? Era esa clase de lugar, Dios dijo.
—¡Osu! ¡Has muerto por un error mío, tu dios!
Respondí.
—¿No te parece que eso es demasiado cruel?
Dios dijo.
—Como disculpa te enviaré a un mundo de fantasía con espadas y magia, como extra te daré un poder trampa, ¡Te haré tan fuerte como lo desees! Dinero, poder, mujeres, ¡Todo será como lo desees!
Respondí.
—¿Es en serio?
Dios dijo.
—¡En serio!
Estaba conmovido.
—¡Muchas gracias! ¡Estoy realmente feliz!
Dios dijo.
—¡Vamos! ¡Es la hora que a todos les gusta! ¡La elección del poder trampa!
Respondí.
—Por ahora hazme apuesto por favor.
Dios dijo.
—¿Apuesto?
Respondí.
—Si, apuesto, quiero ser alguien atractivo.
Dios dijo.
—¿En serio estás bien con eso?
Respondí.
—Si, en serio no me importa que sea solo eso.
Continué.
—Que cualquiera en el mundo se enamore de mí, me envidie, me tenga celos, el hombre apuesto definitivo, una belleza aplastante para todo el mundo, que sin importar sean niños o ancianos, hombres o mujeres, nadie pueda evitar voltear a verme, alguien genial, carismatico, ¡Un tipo apuesto perfecto!
Dios pareció de acuerdo.
—Es cierto, ser apuesto es esplendido, si fueras así de apuesto tu vida sería pan comido.
Hablé con propósito.
—¿Verdad? Es como lo dices, ¡Hazme tan apuesto que incluso un dios lo admitiría!
Dios dijo.
—Pero no puedo hacerte apuesto.
Me quejé.
—¿¡Por qué!? ¡Dios!
Dios dijo.
—Haz nacido bajo el destino que no podrás ser apuesto.
Imploré.
—Por favor, por favor hazme apuesto, quiero ser apuesto, sin importar que pecado haya hecho en el pasado por más pequeño que sea los pagaré aquí y ahora, así que por favor, hazme un hombre apuesto.
Dios afirmó.
—Es imposible, no puedo darte ese poder trampa, en definitiva no.
Caí en la desesperación.
—No puede ser…
Dios dijo.
—Elige otro poder trampa.
Me quedé sin habla.
—…
Dios me apresuró.
—Rápido, di que poder trampa es el que quieres.
Así que me apresuré.
—Entonces magia de sanación, una magia capaz de sanar sin importar que tan grande sea la herida o la enfermedad por favor.
Dios asintió.
—Está bien, te daré el poder trampa de tener la más poderosa magia de sanación.
Me limpié las lágrimas que brotaban de mis ojos.
—Muchas gracias.
Dios dijo.
—Diviértete mucho en esta siguiente vida.
Respondí.
—Si, muchas gracias…
Entonces la recepción del poder trapa de reencarnación terminó.
Comments